lunes, 10 de mayo de 2010

La Casa Real y sus maniobras

El acceso a recibir atención médica es un derecho, debe ser gratuito y estar al alcance de cualquier persona sin tratos de favor por su posición social. Yo apuesto por la seguridad social, creo que debe ser un principio básico de cualquier país que defienda la igualdad de clases y la salud de todos sus ciudadanos.

Estos días, el rey como ciudadano que es, con sus deberes (tal vez) y sus derechos, ha hecho uso de nuestra seguridad social acudiendo al Hospital Clínic de Barcelona. Ha sido ingresado en una habitación que pertenece a Barnaclínic. Barnaclínic es algo así como una clínica “VIP” dentro del Hospital Clínic que utiliza espacios, material y personal sanitario de la seguridad social. Es decir, uso de lo público por parte de lo privado, con lo que el coste de sus actividades repercute en la sanidad pública. Esta forma de clínica “privada” ha sido denunciada en varias ocasiones por la CGT. Por lo tanto, a efectos teóricos ha ingresado en una clínica privada, pero a efectos prácticos y oficiales (según la Casa Real) lo ha hecho en una clínica pública.

Por un lado me alegra que este personaje acuda a la salud pública para someterse a una intervención quirúrgica, eso es síntoma de que disponemos de material médico de calidad y grandes avances. Por otro lado me indigna ver, una vez más, que gracias a la corona se acentúen esas diferencias de clase que se están intentando erradicar con el esfuerzo y la lucha de muchas personas y que “sus majestades” se cargan de un plumazo.

El uso privilegiado de la seguridad social por parte de Juan Carlos supone un trastorno en el normal funcionamiento del hospital. Desalojos de zonas hospitalarias, saltos en las listas de espera y despliegues de alta seguridad que entorpecen el día a día de trabajadores y usuarios.

Pero todo vale para esta familia que se inventa las mil y una maniobras para aparentar humildad. Apoyados por medios de comunicación serviles y bufones, nos quieren hacer ver lo cerca que está el rey de su pueblo con argumentos banales y casposos que están a la altura de cualquiera de sus programas basura.

Si en futuras ocasiones a los Borbones se les ocurre, nuevamente, la brillante idea de hacer uso de la seguridad social para dar una imagen de “campechanismo”, les aconsejo que utilicen las mismas reglas del juego que cualquier hijo de vecino. De lo contrario estarán faltando al respeto a todas aquellas personas que pasan largas temporadas en listas de espera interminables aguardando a ser intervenidos quirúrgicamente.

Por cierto, como persona que es, me alegro de que todo le haya ido bien. Como se suele decir, lo cortés no quita lo valiente.